Morir de Sed
21 ago
He escuchado tristes aseveraciones irresponsables, alarmantes y terroristas, que auguran que en un futuro las guerras no serán por dinero, ni por petróleo, sino por agua. Informaciones complementarias aseguran que compañías de renombre y alcance global estarían comprando terrenos donde se localizan reservas naturales de agua dulce en Sur América. Sin embargo, mi experiencia fue muy distinta al visitar islas del Caribe donde el agua de consumo se extrae del mar, también resulta provechoso conocer de actividades que se desarrollan en Colombia y algunas tierras áridas de África, recuperándolas y fertilizándolas con el agua y la flora del mar. Todas estas experiencias devuelven La Paz y aunque no hagamos oídos sordos, sabemos que el potencial humano es más grande que su capacidad destructiva. Sobrara Ingenio.
Ayer me hicieron esta pregunta: es Verdad que podemos morir de sed, habiendo tanta agua? Decidí tomar la frase en el sentido literal, aunque sabemos que nuestro rico idioma, puede dar lugar a diferente interpretaciones. Cuál fue mi respuesta? Primero me pareció extraña la pregunta, después interesante y mi decisión fue darle una respuesta más ilustrativa de nuestra realidad: en estos momentos a nivel mundial más del 50% de las muertes (siendo la principal causa de enfermedad y muerte (te invito a que busques las estadísticas) son provocadas por el aumento en el consumo de agua (es decir, morimos y enfermamos normalmente por beber agua) y estos excesos detonan en enfermedades cardiovasculares, apoplejías, diabetes y hasta cáncer. Podemos verlo como acción directa e indirecta.
El agua es por sus procesos un residual ácido (Ph menor que 7%), roba minerales nobles, como calcio, magnesio, desequilibra la homeostasis, posicionándose el sodio dentro de las ellas que se vuelven hipotónica y el potasio en los fluidos que seca los músculos, dentro de ellos al corazón (hipertonía celular). Puede causar inflamación, dolores, mal funcionamiento orgánico y sistémico, enfermedades como osteopenia, artritis, insuficiencia renal, etc. pueden verse agudizadas con el exceso de consumo de agua. Sí, podemos morir secos, bebiendo agua tratada de forma inadecuada.
Nuestra respuesta proviene de nuestra experiencia de invertir en salud para no seguir gastando en enfermarnos. Después de percatarnos que enfermarse era un lujo caro que no podíamos seguirnos dando, corregimos hábitos de consumo y agregamos alimentación y suplementos que alcalinizan, cosechando excelentes resultados. Inicia y termina tu día con agua BLU Supreme Omnilife y prepara tus suplementos con esa agua. Tu cuerpo te lo agradecerá así como tus sistemas, órganos y tejidos. Tus células harán la magia del verse, sentirse y estar bien, al momento que activen sus procesos de auto-reparación, regeneración y rejuvenecimiento.
Yo también te lo agradeceré, pues habré impactado una vida en nuestra dirección de aprender a vivir saludable y hacer negocio de vida plena.
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